Hace referencia a la percepción sensorial localizada y subjetiva que puede ser más o menos intensa, molesta o desagradable, que se siente en la palma de la mano, ya sea en reposo o con los movimientos de la misma. El dolor puede ser secundario a quemadura, discontinuidad en el tejido de la piel, traumatismo o daño de nervios que intervienen en la palma de la mano. Tambien puede ser causada por alteraciones inflamatorias de músculos y tejidos blandos como son las tendinitis y el túnel carpiano.
Acuda a su médico cuando el dolor no es controlado con los analgésicos o antinflamatorios.
Consulte si el dolor produce limitación marcada para los movimientos de la mano o pérdida de la fuerza.