Este signos se relaciona con una alteración en el neurodesarrollo de los niños cuando no es adquirido en el momento adecuado. El habla nos permite desarrollarnos como seres humanos de forma individual y además nos permite interactuar con nuestro entorno. Los niños emiten palabras a los 12 meses, a los 18 ya ha adquirido de 2 a 20 palabras y hace frases.
Según la escala de Haizea-Llevant con la que se mide el desarrollo del lenguaje si un niño o niña a los 16 meses de edad no ha pronunciado palabras de forma aislada o a los dos años no pronuncia frases de dos palabras; tiene un retraso en el lenguaje o dificultad en el habla.
Esto puede tener varias causas entre las que se encuentran: falta de estimulación para que el niño hable, que el niño no escuche, que tenga un alteración en los órganos y músculos que producen el habla, retraso mental, alteración neurológica o trastorno del espectro autista entre otros.