Es la ausencia completa de eyaculación, la cual puede estar acompañada o no del orgasmo. Esta condición puede ser primaria cuando nunca ha habido eyaculación, ni mediante la masturbación, con ninguna pareja o durante los sueños.
Usualmente es secundaria, es decir, que el hombre puede eyacular sólo en ciertas circunstancias como con la masturbación o en determinadas prácticas sexuales, pero no en el momento del coito.
Cuando existe orgasmo sin eyaculación se debe, en la mayoría de los casos, a una alteración en la expulsión del semen, lo que se relaciona con la eyaculación retrógrada (en sentido hacia la vejiga y no hacia el exterior).
No se considera una causa para acudir en forma urgente. Debe ser manejado por consulta médica programada.