Autoexamen de la Mama

Un autoexamen de la mama es una inspección o revisión que una mujer se puede realizar por sí misma, desde la intimidad de su casa para buscar cambios visibles o palpables en el tejido mamario y en sus pezones. Es recomendable que por medio de esta inspección la mujer aprenda a conocer sus senos para que una vez determine algún cambio pueda acudir a la consulta médica de modo oportuno pues puede ser una alarma para la detección temprana de cambios malignos como el cáncer de seno. 

Este examen es realizado con frecuencia en las mujeres debido a que son las que mayor incidencia de cáncer de mama presentan. Sin embargo, los hombres también deben estar atentos a no tener masas o cambios en la zona correspondiente a los pezones.

En las mujeres jóvenes y premenopaúsicas se considera como el mejor momento para hacerse un autoexamen es más o menos de 3 a 5 días después del comienzo de su menstruación. No se recomienda hacerlo antes pues en algunas mujeres el síndrome premenstrual se acompaña de dolor mamario ni durante el ciclo pues algunas personas presentan dolor mientras tienen el periodo. En el caso de las mujeres en la etapa de la menopausia se debe realizar el autoexamen el mismo día todos los meses.

En los hombres se recomienda que siempre que vean abultamiento del pezón, se palpen, y en caso de cambios como salida de líquido, presencia de masa, o dolor es necesario que consulte con su médico.

• Retire su ropa, permita que su torso esté desnudo y pueda así palpar y ver sus senos.
• Ubíquese frente a un espejo. Revise la simetría de sus senos, cambios en la piel, si hay hoyuelos, enrojecimiento, manchas extrañas, hundimiento del pezón. Inspeccione sus senos mientras ejerce presión sobre las caderas con ambas manos.
• Frente al espejo coloque la mano derecha detrás de la cabeza, observe si hay cambios en la piel de su seno y del pezón del seno que se va a examinar (el derecho). Luego, con las yemas de los dedos del medio de la mano izquierda (índice, corazón, anular) presione suavemente su seno en dirección en espiral, desde afuera hacia adentro de su tejido mamario mediante movimientos suaves y circulares. Finalice en el pezón y presione verifique si hay salida de líquido.
• Una vez termine la inspección del pezón, palpe con los mismos dedos la zona axilar del seno que ha evaluado. En este caso el derecho. Verifique no que presente masas duras o dolorosas.
• Repita el mismo proceso en el seno izquierdo.

La única preparación que se necesita es conocer las recomendaciones para la realización del autoexamen.

Usted solamente percibe al tacto de su mano, la piel de su seno, axila y el tejido mamario.

En ocasiones si hay una masa dolorosa va a sentir esta molestia de lo contrario el autoexamen no produce dolor.