La Alimentación Parenteral, consiste en la provisión de nutrientes mediante su infusión a una vía venosa a través de catéteres específicos, para cubrir los requerimientos metabólicos y del crecimiento.
Este tipo de alimentación, aporta al paciente por vía intravenosa los nutrientes básicos que necesita, ya que algunas veces, una persona no puede comer (nada en lo absoluto) o comer lo suficiente debido a alguna enfermedad; o bien, el estómago o el intestino pueden estar funcionando anormalmente, o existir antecedente de alguna cirugía gastrointestinal.
Existen 2 tipos de alimentaciones parenterales:
De preferencia, se debe tomar una vía central, ya que como las soluciones de una alimentación parenteral total están concentradas, pueden provocar lesión o trombosis de las venas periféricas.
Ahora bien, la alimentación parenteral parcial puede ser administrada por una vía periférica, ya que muchos pacientes reciben dextrosa o soluciones de aminoácidos mediante este método.
Limpiar la zona de colocación del acceso venoso periféricos (en alguno de los brazos) o bien, determinar si existe necesidad de colocar un catéter venoso central, generalmente localizado en las venas del cuello, el tórax o la ingle.
En el caso de la colocación de catéter venoso central, puede ser necesaria la colocación de anestésicos tópicos o sedación ligera; se debe tener cuidado con el acceso venoso una vez colocado, para evitar contaminar el material y ocasionar infecciones que puedan poner en peligro la vida del paciente.
Algunos pacientes pueden llegar a sentir un dolor moderado por el pinchazo de la aguja, que va disminuyendo de intensidad con el paso de los minutos.
Puede existir un ligero dolor en el sitio de punción, con aparición de un moretón (hematoma) en esa misma zona, que irá desapareciendo con el paso de los días.