Se define como la tendencia a cambiar rápida e impredeciblemente el estado de ánimo de una persona, en presencia de un evento que lo desencadene o sin alguno aparente, lo cual ocurre de manera involuntaria; esto puede abarcar situaciones donde el individuo pasa de la risa al llanto o viceversa, sin que sus emociones guarden una relación coherente con las circunstancias que lo rodean.
Esta situación puede manifestarse por diversas causas como:
Acudir urgentemente en caso de: