Una alteración del habla es una condición en la cual una persona tiene problemas para crear o formar los sonidos del habla necesarios para comunicarse con otros. Esta condición no solo dificulta la comunicación lingüística (fonológica, sintáctica o semántica), sino también tiene consecuencias intelectuales y de la personalidad, interfiriendo en las relaciones interpersonales, rendimiento escolar, social y familiar.
Se produce debido a la alteración de cualquiera de las zonas implicadas en el lenguaje, lo que abarca desde la región cerebral hasta la estructura de la boca o las cuerdas vocales que se encargan de la producción de los sonidos. Por esto se clasifica este tipo de alteraciones en distintos subgrupos como son:
Trastornos orgánicos: alteraciones del habla provocadas por anomalías o malformaciones de los órganos encargados de la articulación de las palabras y su emisión de sonidos. En este grupo están las afasias, disglosias, alalia, disartria.
Trastornos Articulatorios: Dislalia y tartamudez.
Trastornos de la voz: Incluye la ronquera, cambios en el tono de voz, quedarse sin aire durante una oración.
Trastorno Fonológico: Ocurre cuando el último o primer sonido de las palabras (con más frecuencia las consonantes) se puede omitir o cambiar.
En el adulto se recomienda acudir a urgencias en el caso de tener una manifestación súbita en la dificultad para articulación y pronunciación de palabras, puede tratarse de un evento cerebral agudo.
En niños, en casos de infecciones agudas de cavidad oral y garganta si se asocian con dificultad para el habla o se presenta lenguaje poco claro o "gangoso".