La Terapia Cognitivo-Conductal es una psicoterapia estructurada en donde se realiza una combinación de técnicas de la terapia cognitiva y de la terapia conductual.
Es una psicoterapia a corto plazo, en la cual se busca realizar una re- estructuración cognitiva del paciente basado en sus distorsiones mentales, ya que se entiende que la forma en la que un individuo evalúa una situación se basa en sus pensamientos, los cuales son resultado de una síntesis de estímulos internos y externos, reflejando la configuración de uno mismo, el presente y el futuro. Las alteraciones cognitivas se dan en el marco de trastornos afectivos (ansiedad, depresión), trastornos obsesivos, trastornos de la personalidad y trastornos de la conducta alimentaria.
¿Cómo se hace?
Es una psicoterapia individual, por lo general colaborativa entre el paciente y el profesional. Puede ser realizada por un psicólogo o psiquiatra que esté entrenado en este tipo de psicoterapia.
Son aproximadamente 25 sesiones, en donde dependiendo del diagnóstico se utilizarán diferentes técnicas. Se considera realizar las sesiones una vez a la semana y se ponen tareas para realizar en casa o en el ámbito fuera de la terapia y se enseñan nuevas habilidades sociales. Cada sesión se inicia estableciendo un objetivo y se centra en resolver un problema del presente. Se basa en aspectos didácticos, utilizando técnicas cognitivas y técnicas conductuales.
Preparación
No requiere
¿Qué esperar después del procedimiento?
Mejoría de los síntomas afectivos, de la conducta alimentaria, obsesivos, entre otros.