El estrés es una reacción normal de nuestro cuerpo ante eventos que alteren nuestra calma (sentirse amenazado) y es uno de los mecanismos que usamos para afrontar los retos cotidianos y las situaciones difíciles de la vida.
Durante el estrés nuestro cuerpo se “acelera” para tener fuerza y energía para afrontar momentos específicos, produciendo ciertas sustancias llamadas catecolaminas y glucocorticoides. Todas las personas poseen este mecanismo, pero cada sujeto lo afronta de diferente manera. El estrés se convierte en un problema de salud cuando dura por largos períodos o cuando el mecanismo se activa en forma intensa sin que haya una causa que lo justifique, alterando el equilibrio del cuerpo (homeostasis).
-Si se relaciona con pensamientos de muerte o conductas de autoagresión o suicidas.
-Si la sensación de estrés es persistente y afecta las relaciones interpersonales y las actividades cotidianas.