Los potenciales evocados son la técnica diagnóstica que sirve para explorar las vías nerviosas que llevan la información desde los órganos de los sentidos hasta el cerebro. La forma de realizarlos depende de la vía sensorial que se quiera explorar (visual, auditiva, somatosensorial), por lo que hay distintos tipos de potenciales evocados. Suelen ser pruebas no invasivas; el potencial evocado designa la modificación del potencial eléctrico producido por el sistema nervioso en respuesta a una estimulación externa, especialmente sensorial, pero también a un evento interno como una actividad cognitiva y se guarda a través de técnicas como la electroencefalografía (EEG) o la electromiografía (EMG). Cuando los estímulos sensoriales de cualquier tipo llegan al cerebro, provocan secuencias características de ondas en el trazado electroencefalográfico (EEG), que es lo que se denomina potenciales evocados.
La realización de una exploración de potenciales evocados variará en algunos aspectos según se trate de potenciales evocados visuales, auditivos, somatosensoriales o cognitivos. En todos los casos, al paciente se le colocarán diferentes electrodos o sensores en su cuerpo (en diferentes zonas según el tipo de potencial evocado), que recogerán los impulsos o señales bioeléctricas generados por los estímulos a los que es sometido. - Potenciales evocados visuales: la persona sometida a exploración debe mirar fijamente al punto central de una pantalla en la que se muestra una especie de tablero de ajedrez, en el que los cuadros blancos y negros van cambiando alternativamente de posición. Como esta prueba exige la colaboración del paciente, en personas incapaces de colaborar (niños muy pequeños, por ejemplo) se utilizan los fogonazos de un flash como estímulo. - Potenciales evocados auditivos: al paciente se le colocan unos auriculares a través de los cuales se le proporcionan estímulos sonoros en forma de "clic". - Potenciales evocados somatosensoriales: al paciente se le aplica un estímulo táctil eléctrico, habitualmente en el brazo o la pierna, la respuesta al cual es recogida por sensores de registro. - Potenciales evocados cognitivos: la técnica es similar a la de los potenciales evocados auditivos. Se utilizan para distinguir en casos de deterioro cognitivo si la causa es orgánica (enfermedad de Alzheimer y otro tipo de demencias) o psíquica (depresión, por ejemplo).
- Evitar el uso de gel en el cabello. - Evitar el consumo de bebidas alcohólicas o cafeína el día del estudio.
Esta prueba es completamente indolora y a lo sumo puede causar ligeras molestias: - Picor al aplicar un gel en el cuero cabelludo, que es especial para la colocación de los electrodos. - Durante la exploración somatosensorial, el paciente percibirá ligeros calambres.
Algunos pacientes han reportado cansancio leve.