La columna vertebral está conformada por varios elementos, entre ellos las vértebras y los discos intervertebrales. Los discos intervertebrales amortiguan las vértebras, permitiendo la movilidad de la columna; se componen de un anillo fibroso, periférico, que posee fibrocartílago resistente y un núcleo pulposo, de consistencia gelatinosa, que en la juventud contiene 90% de agua, pero que con el tiempo, va disminuyendo dicho porcentaje, haciéndose más rígido.
La espondilosis es una patología degenerativa de los discos intervertebrales, que se asocia a una reacción de las vértebras, con formación de osteofitos (prominencias óseas) y deformación de la columna, ocasionando pérdida de la movilidad. Es más común a nivel cervical.
La degeneración del disco se produce por diferentes factores:
- Alteración de la composición del nucleo pulposo, que con el envejecimiento, disminuye su contenido de agua, debido a menor vascularización y cambios en la estructura química.
- Factores mecánicos: exceso de cargas o malas posturas
- Factores genéticos: existe predisposición familiar.
Como consecuencia de esta degeneración, puede ser que produzcan hernias discales, sobre todo a nivel de C5 y C6; esto significa que una parte del disco protruye hacia el canal por donde pasa la médula espinal y esto trae como consecuencia compresión y una serie de manifestaciones clínicas como dolor, déficit en la sensibilidad y pérdida muscular. También puede comprimir las arterias que llevan sangre al resto de la médula espinal.
El diagnóstico se realiza mediante una evaluación médica cuidadosa, ameritando realizar radiografías de columna vertebral y resonancia magnética
El tratamiento inicial es médico, basándose en reposo y antiinflamatorios para aliviar el dolor, y quirúrgico cuando existen síntomas graves como pérdida de la fuerza muscular.
¿Cómo se manifiesta?
Una persona con esta enfermedad puede presentar:
Dolor en Dedos de la Mano
Hipoestesia en Manos
Dolor Cervical
Parestesia en Manos
Alteraciones de la Marcha
Recuerda que aunque tengas uno o más de estos síntomas, debes confirmar el diagnóstico con tu profesional de la salud.
Puede existir otras manifestaciones además de las descritas, que son menos frecuentes.
Signos de alarma
Los siguientes signos y síntomas indican que debes acudir al servicio de urgencias , si la enfermedad ya es una urgencia acude inmediatamente o en horas: