Es un procedimiento que consiste en la aplicación de insulina la cual es subcutánea (tejido graso debajo de la piel) y que es realizado por personas con diabetes para el control de esta enfermedad. Generalmente la aplicación se hace en zonas donde hay abundante tejido graso dado que en el es mejor la absorción del medicamento, por lo cual se aplica en zonas como: abdomen, piernas y brazos. Estos sitios de aplicación deben ser cambiados de manera frecuente dado que de no hacerlo puede generar una proliferación del tejido graso, algo conocido como lipodistrofia.
No se requiere una preparación especial.
Puede sentirse un ligero dolor a la aplicación del medicamento.
Molestia minima en al zona de la aplicación.