El ataque cardíaco (infarto) se origina por un fallo del suministro de sangre y oxígeno al corazón causando isquemia miocárdica, esta aparece como consecuencia de una alteración en el flujo coronario, produciendo falta de oxígeno en el territorio de la arteria comprometida. La isquemia miocárdica puede presentarse como SECUNDARIA a factores que incrementan el consumo miocárdico de oxígeno, generando desequilibrio entre oferta y demanda como la hipertensión arterial, las arritmias; y PRIMARIA en el caso de placa inestable, causada por fractura, ruptura, fisura o erosión de una placa ateroesclerótica, con exposición de área del sub-endotelio, y la consiguiente trombosis intraluminal. El ataque cardíaco, engloba a un conjunto de cuadros clínicos, caracterizados por isquemia miocárdica aguda, secundario a inestabilidad de placa. En el mismo se incluyen: 1. Angina inestable 2. Infarto miocárdico agudo sin elevación del segmento ST 3. Infarto miocárdico agudo con elevación del segmento ST, ó patrón de bloqueo completo rama izquierda de nueva aparición. 4. Muerte súbita de causa cardíaca.