Los callos y las callosidades, son un aumento del grosor de la piel (por un acúmulo de queratina), haciéndola de consistencia dura; aparecen como medida de protección tras mecanismos de presión y/o fricción repetitivos.
Casi siempre se forman en los dedos de las manos o de los pies. Si eres una persona sana, únicamente necesitas tratamiento para los callos y las callosidades si te generan incomodidad. Para la mayoría de las personas, el simple hecho de eliminar la fuente de fricción o de presión hace que desaparezcan. Si tienes diabetes o alguna otra enfermedad que disminuye la circulación de la sangre a los pies, tienes un mayor riesgo de tener complicaciones a causa de los callos y las callosidades
Si es doloroso y/o presenta salida de líquido o material purulento, inflamación, enrojecimiento, impide el libre movimiento o las actividades de la vida diaria, deberá consultar con su médico.