La cápsula endoscópica es un procedimiento que permite diagnosticar enfermedades del tracto digestivo (principalmente intestino delgado), esto se logra por medio del uso de una cámara inalámbrica muy pequeña que se encuentra dentro de una capsula del tamaño de una píldora promedio; una vez se ingiere la cápsula esta permite la visualización de la mucosa intestinal, ya que a medida que recorre el sistema digestivo, toma fotografías que se recogen en un grabador portátil durante un período que oscila entre las 6 y 8 horas.
No causa ningún tipo de malestar el procedimiento ya que solo se debe tragar la cápsula.
Tras el procedimiento se puede reanudar el consumo de líquidos transparentes y luego de al menos 4 horas puede alimentarse con comidas blandas.
Puede expulsar la cápsula después de algunas horas o varios días al defecar lo cual no causa ningún tipo de dolor o molestia.