Es la contracción del útero que se produce principalmente en el embarazo por acción de la hormona oxitocina (producida por el propio cuerpo o suministrada como medicamento), se perciben como un endurecimiento al palpar el abdomen y usualmente están acompañadas de dolor. Esto permite la apertura del canal del parto para que pueda salir el bebé y la placenta.
Las contracciones uterinas se presentan generalmente en el tercer trimestre del embarazo, para conocer su frecuencia se deben contar cuántas contracciones se presentan en 10 minutos, lo normal cuando se está en trabajo de parto es que hayan de 3 a 5 contracciones en este tiempo, en este caso se requiere atención médica. Cuando son menos de esa cantidad es algo normal y generalmente no requiere atención médica.
Es usual que antes del trabajo de parto se presenten contracciones uterinas falsas (contracciones de Braxton Hicks) que se caracterizan por: ser irregulares, son incómodas más no dolorosas, no aumentan su intensidad ni frecuencia y pueden durar un máximo de 2 minutos. Estas contracciones sirven como preparación para el trabajo de parto verdadero.
Cuando se presentan en un momento diferente del embarazo, se llaman contracciones uterinas anormales, y son motivo para consultar al servicio de urgencias.
Si está en embarazo y ocurre cualquiera o varias de las siguientes situaciones: