El dolor de garganta se manifiesta con síntomas como carraspera, irritación, dificultad o dolor para tragar, voz ronca o disfónica, aparición de ganglios inflamados y dolorosos a la palpación en cuello o mandíbula y aumento del tamaño de las amígdalas y en algunos casos aparición de puntos blancos o secreción de pus en estas estructuras.
En caso de persistencia del dolor de duración prolongada por semanas o meses. Asociación con pérdida de peso importante. Dolor intenso que impide la ingesta de alimentos. Palpación de masas. Fiebre persistente. Vómitos con sangre.