Las arritmias, son alteraciones persistentes en la conducción de los impulsos cardíacos, generalmente comienzan con un latido anormal o con cambios en el ritmo normal del corazón.
Si el sistema que se encarga de la conducción de los impulsos cardíacos se ve alterado de alguna forma, el ritmo de los músculos también sufrirá una afectación, resultando en:
- Un aumento en el número de latidos del corazón (taquicardia),
- Una disminución en el número de latidos del corazón (bradicardia).
- Arritmias Cardíacas (pérdida de la regularidad del latido cardíaco).
Este aumento o disminución de la frecuencia cardíaca, se establece al tomar en consideración como cifras normales, una frecuencia de entre 60 y 80 latidos por minuto.
Las células del corazón tienen un sistema eléctrico que se encarga de transmitir impulsos a los músculos cardíacos para que se pueda dar la contracción mecánica y rítmica de los mismos, este impulso va del nódulo sinoauricular (Nodo SA, conocido como "el marcapasos del corazón") que genera la contracción de las aurículas, y viaja al nódulo aurículoventricular (Nodo AV), posteriormente, el impulso eléctrico pasa a través del Haz de His y se ramifica al resto del corazón a través de una fibras denominadas "de Purkinje", para que los ventrículos se contraigan.
Además de las alteraciones en frecuencia descritas previamente, existen arritmias cardíacas que se clasifican de acuerdo al sitio anatómico donde se produce el trastorno de conducción de manera específica; teniendo:
- Taquicardia Ventricular: Es cuando el marcapasos del corazón (es decir, el nódulo SA), ya no controla los latidos, sino que las otras zonas de conducción eléctrica, toman su función. En esta arritmia, los latidos cardíacos se aceleran y el paciente puede llegar a sentir palpitaciones, falta de aire o desmayos.
- Fibrilación Ventricular: De todas las arritmias, es la más grave; los latidos en esta alteración de la conducción son irregulares y no controlados por lo que en lugar de sólo tener una pulsación a destiempo, se tienen varios impulsos originados de diferentes lugares estimulando al mismo corazón, pudiendo llegar a alcanzar hasta los 300 latidos por minuto. Es necesario obtener atención médica inmediata y si es posible, iniciar medidas de reanimación cardiopulmonar.
- Contracciones Ventriculares Prematuras: En esta arritmia, los ventrículos se contraen antes de lo debido, fuera de la secuencia que les corresponde; usualmente no son de gravedad y en gran parte de los casos, no ameritan tratamiento médico.
- Arritmias Supraventriculares
- Taquicardia Supraventricular: Se produce cuando se originan señales eléctricas anormales en las cavidades superiores del corazón (es decir, las aurículas), lo cual interfiere con las señales eléctricas que se originan en el nódulo SA (el marcapasos natural del corazón); por lo tanto, los latidos en las aurículas aumentan la frecuencia cardíaca.
- Fibrilación Auricular: Es un ritmo rápido e irregular secundario a movimientos convulsivos de las fibras musculares individuales del corazón. Es una de las principales causas de accidentes cerebrovasculares, especialmente en las personas mayores.
- Síndrome de Wolff-Parkinson-White (WPW): Es un grupo de anomalías ocasionadas por vías de conducción adicionales entre las aurículas y los ventrículos, lo que ocasiona que las señales eléctricas lleguen a los ventrículos antes de lo debido y regresen a las aurículas.
- Flúter Auricular, se produce cuando las aurículas laten muy rápido, haciendo que los ventrículos latan también de manera ineficiente.
- Bloqueos Cardíacos: Se produce un bloqueo cardíaco cuando el nódulo SA envía correctamente la señal eléctrica pero ésta no pasa por el nódulo auriculoventricular (AV) o las vías de conducción eléctrica inferiores con la rapidez debida. Los bloqueos se deben principalmente al proceso de envejecimiento o a una hinchazón o cicatrización del corazón que a veces es ocasionada por la enfermedad arterial coronaria; en términos generales, existen bloqueos de primero, segundo y tercer grado.
Ante cualquier trastorno de la conducción; es necesaria la valoración médica presencial para determinar las causas que están ocasionando esas alteraciones y darles tratamiento oportuno.
Recuerda que aunque tengas uno o más de estos síntomas, debes confirmar el diagnóstico con tu profesional de la salud.
Puede existir otras manifestaciones además de las descritas, que son menos frecuentes.
Puede existir otros signos de alarma además de los descritos, que son menos frecuentes.
Puede existir otras complicaciones además de las descritas, que son menos frecuentes.