Este es un procedimiento por medio del cual se obtiene una muestra de líquido amniótico, que es el que rodea al feto durante el embarazo. Se utiliza para hacer cultivos, análisis bioquímicos, genéticos y de los cromosomas. También ha sido utilizado como medio para inyectar algunos medicamentos directamente al saco gestacional. Otro uso ha sido la extracción de líquido amniótico, en caso de polihidramnios.
¿Cómo se hace?
Se acuesta a la gestante de lado, se realiza un rastreo ecográfico para valorar la biometría fetal, posición y semanas de gestación, también permite planear cual será la zona de punción. Se procede a hacer una limpieza exhaustiva del área de punción en el abdomen, se procede a la aplicación de la anestesia regional o general (habitualmente se realiza sin anestesia). Bajo guía ecográfica se introduce la aguja, se posiciona y se extrae el líquido amniótico, se retira la aguja y se guarda la muestra. Se realiza nuevamente una ecografía para valorar el bienestar fetal.
Preparación
Se requiere ayuno, en algunos casos es posible que se requieran algunas preparaciones especiales si va realizarse bajo anestesia general. Si el embarazo es de pocos meses, es posible que se solicite la ingesta de agua para una mejor visualización en el ultrasonido.
¿Qué se siente durante el procedimiento?
Es probable que se sienta una pequeña molestia luego de introducir la aguja, si se realiza bajo anestesia local o general no se siente nada.
¿Qué esperar después del procedimiento?
Después del procedimiento pueden aparecer cólicos, pequeños sangrados vaginales, pérdidas vaginales pequeñas de líquido amniótico e incluso fiebre.