Es el aumento de tamaño de la próstata por un crecimiento benigno (no relacionada con cáncer), del tejido prostático, que puede generar una disminución en el flujo normal de orina.
La hiperplasia prostática es considerada una parte normal del envejecimiento masculino y es dependiente de hormonas como la testosterona y la dihidrotestosterona.
Puede generar: aumento de la frecuencia urinaria, necesidad de levantarse frecuentemente en las noches para orinar, dificultad para iniciar la micción, disminución del calibre y fuerza del chorro y pérdida de pequeñas cantidades de orina de manera accidental.
Es común que se presente con el aumento de los años, pero sobre todo inicia a partir de los 45 años.