El consumo o adicción a las anfetaminas es el consumo problemático de anfetaminas que provoca un deterioro significativo y se acompaña de dos de los siguientes síntomas en un plazo de 12 meses:
Consumo de anfetaminas con frecuencia en cantidades superiores o durante un tiempo más prolongado del previsto.
Deseo persistente o esfuerzos fracasados de abandonar o controlar el consumo de anfetaminas.
Inversión de mucho tiempo en actividades necesarias para conseguir anfetaminas, consumirlo o recuperarse de sus efectos.
Ansias, deseo o necesidad de consumir anfetaminas.
Consumo recurrente que conlleva al incumplimiento de deberes fundamentales en el trabajo, la escuela o el hogar.
Consumo continuado de anfetaminas a pesar de sufrir problemas sociales o interpersonales persistentes.
Abandono o reducción de actividades sociales, profesionales o de ocio por el consumo de anfetaminas.
Consumo recurrente de anfetaminas en situaciones que provoca un riesgo físico.
Continuar el consumo de anfetaminas a pesar de saber que se sufre un problema físico o psicológico persistente.
Tolerancia y abstinencia a las anfetaminas.
¿Cómo se manifiesta?
Una persona con esta enfermedad puede presentar:
Aislamiento Social
Abandono de Actividades
Inversión de Mucho Tiempo en Actividades Necesarias para Conseguir la Sustancia
Consumo Recurrente que Lleva a Incumplimiento de los Deberes en el Trabajo u Hogar
Consumo Recurrente en Situaciones que Provoca un Riesgo Físico
Recuerda que aunque tengas uno o más de estos síntomas, debes confirmar el diagnóstico con tu profesional de la salud.
Puede existir otras manifestaciones además de las descritas, que son menos frecuentes.
Signos de alarma
Los siguientes signos y síntomas indican que debes acudir al servicio de urgencias , si la enfermedad ya es una urgencia acude inmediatamente o en horas: