La insuficiencia renal crónica consiste en el deterioro progresivo e irreversible de la función renal. Es decir, los riñones pierden lentamente su capacidad para eliminar toxinas y controlar el volumen de agua del organismo, cuyo grado de afección se determina con un filtrado glomerular (FG) <60 ml/min/1.73 m.
Cuando la enfermedad renal crónica llega a una etapa avanzada, pueden acumularse niveles peligrosos de líquidos, electrolitos y desechos en el organismo los cuales traen problemas de salud.