Consiste en un respuesta inflamatoria de cualquier parte del tracto urinario (desde el riñón, vejiga y uretra) dada por la infección ya sea de una bacteria, virus, hongo o parásitos. Que provoca síntomas como: dolor o ardor al orinar, urgencia para ir a orinar, aumento de la frecuencia para orinar, olor fétido en la orina y/o dolor pélvico.
Durante el primer año de vida las infecciones urinarias son más frecuentes en varones, a partir del año son más frecuentes en niñas y en mujeres en la edad adulta.