El "Desarrollo de Caracteres Sexuales Secundarios Masculinos", forma parte de los rasgos normales que distinguen al hombre de la mujer, desde el punto de vista fenotípico, es decir, las características evidenciables de un individuo.
El desarrollo de los caracteres sexuales secundarios masculinos, se lleva a cabo predominantemente durante la adolescencia, es decir, en un período de transición entre la niñez y la edad adulta, que habitualmente acontece entre los 9 y 19 años de edad, donde es frecuente encontrar el máximo "estirón", en cuanto a estatura.
En los hombres, los caracteres sexuales secundarios, incluyen: